El primero de mayo de 2006 es una fecha que marcó un antes y un después en el derecho laboral boliviano, con la publicación del Decreto Supremo N.º 28699 se reconoció el derecho a la estabilidad laboral de los trabajadores y se derogó el artículo 55 del Decreto Supremo N.º 21060 que permitía la libre contratación y despido de personal.